miércoles, 22 de diciembre de 2010
Himno del Carbayedo
jueves, 2 de diciembre de 2010
Fútbol en el barrio alto
Cita diaria, prolongada generación tras generación, en el recinto cerrado del mercado de los gochos. Todas dieron buenos futbolistas.
martes, 30 de noviembre de 2010
El fornín
viernes, 26 de noviembre de 2010
El caño
Fuente asentada en los aledaños del lavadero que existió en la parte baja del Carbayedo. Dió nombre a la zona y sus moradores. Así se decía ¿eres del caño? , sí, soy del caño.
Manolo´l florindingo, dicía que los d'ellí, los del cañu, yeren los probes y que los ricos taben enriba.
Manolo el florindingo, decía que los de allí, los del caño, eran los pobres y que los ricos estaban arriba ...
Constaba de dos partes. Na final, les muyeres xabonaben la ropa, y en amestar al cañu, daben en esclariala. Resalvo dicir les conxustes de marujeo y crítica que surdíen ente elles ...
Constaba de dos partes. En la final, las mujeres enjabonaban la ropa, y en la anexa al caño, procedían a aclararla. Obvio decir las tertulias de marujeo y crítica que surgían entre ellas ...
Foi la laundry manual de Marcelina la planchadora, a donde allegaba prácticamente a diariu pa llavar prendes de los sos veceros. Ensugar na so propia casa (enriba de Casona), dando un plancháu perfectu, y apurriendo los traxes y gabardines cómo si agora vinieren de tintorería. A les camises nun los faltaba'l almidonado de la dómina. Planchar qu'utilizaba ella y el so hom, e'l planchador, yeren de fierro y calecíes enriba de la chapa de la cocina de carbón.
Fue la laundry manual de Marcelina la planchadora, a donde acudía prácticamente a diario para lavar prendas de sus clientes. Las secaba en su propio domicilio (encima de Casona) , dando un planchado perfecto, y entregando los trajes y gabardinas cómo si ahora procedieran de tintorería. A las camisas no les faltaba el almidonado de la época. Las planchas que utilizaba ella y su marido el planchador, eran de hierro y calentadas encima de la chapa de la cocina de carbón.
Cuando se desmanteló'l llavaderu, el Conceyu llevó'l cañu a la ilesia de San Nicolás de Bari, onde entá permanez. Sería xusto volviera al Carbayedo, que tien espaciu abondu y fayadizu.
Cuando se desmanteló el lavadero, el Ayuntamiento llevó el caño a la iglesia de San Nicolás de Bari, donde aún permanece. Sería justo volviera al Carbayedo, que posee espacio suficiente y adecuado.
jueves, 25 de noviembre de 2010
El bebedero
Fue instalado para abrevar ganado. Los lunes se celebraba en el barrio alto el mercado semanal de ganados y este no podía carecer de agua. Así, quiénes acudían a él para mercar su ganado, sabían de antemano la existencia del elemento líquido.
De él llegaba el agua a los abrevaderos que había en la cuadra de Carbajal, para atender su amplia ganadería. De ahí que Ramón el casero y su hijo Ramonín cuidaran que todo fuera bien.
Prestó servicio, porque en muchas ocasiones amas de casa del barrio se abastecían de agua del bebedero, bien por corte municipal o por no disponer de ella en casa. Una de estas personas era Manuelina, de condición muy humilde y que no llegó a la indigencia por orgullo. Sobrevivía de la rebusca y todo le valía, recogía hasta los perdigones de escopeta de las barracas de tiro en Las Meanas. La mujer no tenía agua en casa e iba al bebedero a buscarla, regresando con el caldero encima de la cabeza.
Acalorados chavales introducían de golpe la cabeza en él, refrescando la sudada contraída jugando al fútbol en el mercado de los gochos, lo que hacían a diario, si no lo impedía el guardia municipal. En ocasiones, aparecía por sorpresa Ramón el carretero y los zambullía de cintura para arriba. Cosa que hizo voluntariamente aquella pareja que llegó corriendo desde Casa Guardado, porque ambos habían apostado quién comía más guindillas, y claro ...
Sí, el bebedero fue y es la piscina del Carbayedo.